martes, 23 de diciembre de 2008

PARA EL NUEVO AÑO 2009


DE TODO CORAZON

ELEMENTAL DEBER DEL CIUDADANO ANTE EL DISCURSO DEL REY DE NAVIDAD


Futuro ciudadano español de la próxima III Republica Española, dándome una lección magistral de la cívica actitud a mantener ante el discurso que leerá Su Majestad El Rey don Juan Carlos I, en todas las cadenas de televisión de España, la noche del 24 que llaman Nochebuena, un poco antes de que empecemos a cenar.
Y, para que luego no me salga yo diciendo que dije digo donde quise decir diego, firmo lo que antecede en Zaragoza a veintitres de Diciembre del año monárquico de dos mil ocho. Que luego pasa lo que pasa.
Firmado: Manuel Sogas Cotano.

SECRETOS DE COCA COLA

(Bernard Madoff, honorable estafador de banqueros y grandes fotunas)

¿Cómo es posible –se preguntaba un gestor de fondos francés en el anonimato- que entidades serias creyeran en rendimientos superiores al 12% sin que les asaltara ninguna duda?, en relación a la estafa de 50.000 millones de dólares, cometida por el prestigiosísimo señor financiero de altos vuelos (hijoputa le llamarían en mi pueblo), Bernard Madoff.
¿Qué varita mágica y poder de convicción tenía el hijoputa (lenguaje llano y pueblerino para entendernos, colega. Que yo soy como el Rey, campechano) Bernard Madoff, para convencer a los irresponsables colegas suyos del Banco de Santander, entre otros, dejándolos contentos y felices, cual hartazón de perdices que se hubieran dado, al ser requerido aquel por estos, sobre la salud del dinero metido en los bolsillo y cajones del H.P. Bernard Madoff?
Elemental, queridos míos. Madoff les respondía que él tenía un secreto para rentabilizar los capitales puestos en sus manos, de la misma naturaleza que el de la Coca Cola, y por eso no lo podía decir, y así, angelitos míos, los banqueros del Santander, BBVA y otros franceses, británicos, holandeses, japoneses, austriacos y suizos, caían convencidos por el influjo de la Coca Cola, a los pies del nunca bien definido hijoputa Madoff.
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